Desde muy corta edad, entro en contacto con la música de nuestra tierra a través de un tío: Pedro Manrique “El Reino”, que fue dulzainero de Riaza desde la década de los 40 del pasado siglo. Con 8 años comienzo a tocar la flauta dulce en el colegio y mis primeras melodías tradicionales.
Posteriormente, a los 16 años, recibo clases de dulzaina y percusión en Madrid de la mano de Félix y Teófilo Sánchez, Los Talaos. Al mismo tiempo, comienzan mis actuaciones en público, sobre todo en la comarca Nordeste de Segovia, cumpliendo el compromiso de tocar en la fiesta del Pilar de Navares de Enmedio de 1992, con 17 años de edad.
Hasta el año 2002, tengo la suerte de tocar con distintos compañeros segovianos: jóvenes maestros como Daniel Cabello o Rodrigo Peñas y algunos mayores como Los Hermanos García de La Matilla, Vicente y Frutos Martín Blanco de El Cubillo o Antonio Gil de Matabuena. A finales de la década de los 90 amplío conocimientos y repertorio de la mano de Luis Barreno en la Escuela de dulzaina de la Diputación de Segovia y desde hace una década vengo actuando con el grupo “Los Dulzaineros de Riaza”, formado en un principio por Moisés Goya (dulzaina y caja), Elena de Frutos (dulzaina y caja) y Andrés Ruíz (Bombo y platillos), sustituido en 2011 por Angel Fernández. Con esta formación he recorrido numerosas localidades, sobre todo de Segovia, Madrid y Guadalajara, hemos participado en importantes festivales de música folk, como el desaparecido “Son de aquí” de Laguna de Duero o en el XXVI Certamen Tierra de Pinares, de Aldeamayor de San Martín (ambos en Valladolid). Asimismo he centrado mis esfuerzos en recuperar viejas melodías tradicionales de la zona de Riaza y hemos organizado durante varios años un festival de dulzaina y música folk en la villa.